Gestión del Tiempo

Gestión del Tiempo

Cuando comenzamos a construir un negocio, uno de los grandes desafíos es la gestión del tiempo.

Desde etapa idea, queremos que el negocio comience vendiendo de inmediato, que nos confirme su viabilidad y que todo esté listo en el menor tiempo posible. Luego, cuando el negocio ya está en marcha, enfrentamos nuevos desafíos e incertidumbres y deseamos que todo se resuelva rápidamente.

Los emprendedores nos movemos entre la gestión del tiempo de producción, la puesta en marcha, la comunicación con nuestros clientes y la venta. Nos abruma la gran cantidad de inconvenientes que podemos enfrentar y los plazos que hay que cumplir constantemente.

Es como si, siempre estuviéramos en una lucha interna con la gestión de nuestro tiempo laboral, si a eso le sumamos el tiempo personal y la aceleración que nos imponen las redes sociales, donde todo parece urgente, el caos puede apoderarse de nosotros.

¿Cómo podemos entonces disfrutar y vivir en el presente en medio de tanto caos de gestión?

La vida nos invita a bajar unas revoluciones internas, a no ahogarnos en las actividades cotidianas, a relajar nuestra mente y nuestras agendas. Podemos hacer todo lo que queramos, pero no todo al mismo tiempo.

Para eso, la invitación es comprender que el tiempo es nuestro aliado, no nuestro enemigo, si aprendemos a tratarlo con respeto y consciencia.

La calma interna, la gestión del tiempo en ciclos más extensos —semanas, meses, años—, la confianza en nosotros mismos y en los tiempos naturales de materialización, de cada paso son claves en este proceso.

No olvidemos que, una vez que hemos hecho nuestra parte como seres humanos —decisión y acción—, existen energías superiores que, con sus propios tiempos y procesos, contribuyen a que las cosas comiencen a tomar forma.

Cuando internamente aceptamos que somos co-creadores, pero que la decisión final no está enteramente en nuestras manos, aprendemos a soltar el control, nos volvemos más calmos y flexibles ante la vida y comprendemos que es solo nuestro ego, desde el miedo, el que quiere todo de inmediato y exactamente como lo imaginamos.

Pero, ¿y si lo que deseamos no es lo más adecuado para nuestro aprendizaje? ¿O si no es la forma en que realmente debe manifestarse?

Hay muchos factores en juego, pero, ¿y si decidimos comenzar a confiar?

 

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